Las instalaciones de la bodega, llenas de innovación y tecnología, marcan la diferencia a la hora de poner en valor nuestra variedad más preciada, la uva monastrell. Tal es así, que el propio diseño de la bodega, proyectada en diferentes niveles, permite el trasiego del vino de Alicante aprovechando la fuerza de la gravedad, sin necesidad de utilizar bombas eléctricas, lo que posibilita la elaboración de unos vinos más naturales y la apreciación de todos sus atributos y propiedades. También se cultivan las variedades Cabernet Sauvignon, Alicante Bouschet y Petit Verdot.